Malena es una bella mujer que paraliza, literalmente, las calles de su pueblo al son de su contundente movimiento de caderas. Su divina belleza embelesa a todos los hombres, pero muy en especial a Renato, un niño que vivirá su primer amor a través de las curvas de esta mujer. Malena es criticada como si estuviera vendiendo su cuerpo por el mero hecho de ser bello y pasearlo por el pueblo. Es la eterna cuestión de aquellos que por ser superiores o simplemente diferentes en algún sentido, son marginados. Es la hipocresía de una sociedad que trata de machacar a quienes responden a lo que les gustaría ser, para regodearse en su mal y no darse cuenta de que la porquería que llevan dentro no les va a dejar ser felices en toda su puta vida.
Malena, empezó a tomar forma en la mente de Giuseppe Tornatore poco después de que finalizara Cinema Paradiso (1.988). Encontró la evocativa historia de Malena y Renato en un relato corto escrito por el veterano guionista Luciano Vincenzoni, que había escrito la historia de Malena a partir de sus propios recuerdos de una mujer que alteró totalmente su pequeño pueblo italiano durante la Segunda Guerra Mundial.