Andre de Dienes (Andor György Ikafalvi-Dienes, December 18, 1913 – April 11, 1985)
La vida del fotógrafo de André de Dienes cambió para siempre un día de 1945, cuando conoció a una joven y hermosa aspirante a modelo llamada Norma Jeane Dougherty. Se enamoró al instante de su inocencia y su atractivo y fueron novios brevemente. Juntos emprendieron muchas aventuras por la carretera en aquellos años tempranos, con De Dienes fotografiando a Norma Jeane en todo escenario natural posible, dentro de su estilo inspirado y original. Pronto forjó un enorme portfolio de fotografías impresionantes de la sonriente morena que contribuyó a lanzar su carrera de modelo y, algunos años más tarde, una trayectoria cinematográfica que iba a hacer de ella una leyenda.
«Queridísima Norma Jean:
Le resulta tan doloroso a un hombre no poder hacer el amor, ¡especialmente si su amada está tan cerca!, quizá ella también sufra de esta abnegación. Pero es demasiado tímida para dejarse llevar…
¡Es una lástima que los seres humanos seamos tan tímidos! ¡De que gloriosa y placentera noche podríamos disfrutar si nos atreviéramos!.
Los cementerios están llenos de cadáveres y esqueletos que un día estuvieron vivos, pero que fueron demasiado tímidos, estrictos, religiosos, moralmente ligados para satisfacer sus verdaderos instintos, y quizá durante toda la vida estuvieron atormentados por el desamor. Millones y millones de personas han muerto sin disfrutar lo suficiente de placeres terrenales.
Norma Jean, el amor es lo único real en la vida, lo único que realmente importa. Te ruego que vengas a llamar a mi puerta, que me dejes amarte. Nunca te abandonaré, siempre te amaré”.
Tu húngaro loco
André