ANTÓN CHROMA
Desgarrada la nube; el arco iris
brillando ya en el cielo,
y en un fanal de lluvia
y sol el campo envuelto.
Desperté. ¿Quién enturbia
los mágicos cristales de mi sueño?
Mi corazón latía
atónito y disperso.
…¡El limonar florido,
el cipresal del huerto,
el prado verde, el sol, el agua, el iris…!,
¡el agua en tus cabellos!
Y todo en la memoria se perdía
como una pompa de jabón al viento.
ANTONIO MACHADO
Oh! je voudrais tant que tu te souviennes
Des jours heureux où nous étions amis.
En ce temps-là la vie était plus belle,
Et le soleil plus brûlant qu’aujourd’hui.
Les feuilles mortes se ramassent à la pelle.
Tu vois, je n’ai pas oublié…
Les feuilles mortes se ramassent à la pelle,
Les souvenirs et les regrets aussi
Et le vent du nord les emporte
Dans la nuit froide de l’oubli.
Tu vois, je n’ai pas oublié
La chanson que tu me chantais.
C’est une chanson qui nous ressemble.
Toi, tu m’aimais et je t’aimais
Et nous vivions tous deux ensemble,
Toi qui m’aimais, moi qui t’aimais.
Mais la vie sépare ceux qui s’aiment,
Tout doucement, sans faire de bruit
Et la mer efface sur le sable
Les pas des amants désunis.
“Les feuilles mortes”, escrita por Jacques Prévert
FOTOGRAFÍAS DE ANTÓN CHROMA
Os hablo de una época
que los menores de veinte años
no pueden conocer.
En aquellos tiempos,
Montmartre colgaba sus lilas
bajo nuestras ventanas,
y si bien el humilde refugio
que nos servía de nido,
no tenía buen aspecto
fue allí donde nos conocimos.
Yo criaba mi hambruna
y tú posabas desnuda.
La bohemia, la bohemía
significaba…
…somos muy felices
La bohemia, la bohemía
comíamos un día sí y otro no.
En los cafés de la zona,
unos cuantos esperábamos la gloria.
Y, aunque míseros y con el estómago vacío,
seguíamos creyendo en ella.
Y cuando alguna cantina
nos aceptaba un lienzo
a cambio de una buena cena caliente,
recitábamos versos,
olvidando el invierno
en torno al mantel.
La bohemia, la bohemía
significaba…
…eres hermosa
La bohemia, la bohemía
y todos teníamos talento.
A menudo, ante mi caballete,
pasaba las noches en vela,
retocando el trazo de la línea de un seno,
del contorno de una cadera.
Y no era hasta la mañana siguiente,
sentados ante un café con leche,
cuando, agotados pero felices,
teníamos que amarnos
y amar la vida.
La bohemia, la bohemía
significaba…
…tenemos veinte años.
La bohemia, la bohemía
Y vivíamos del espíritu de la época
Cuando por casualidad,
en un día cualquiera,
voy a pasear por mi antiguo barrio,
ya no reconozco ni las paredes ni las calles
que vieron mi juventud.
Desde lo alto de una escalera
busco el estudio del que ya nada queda.
Con su nueva decoración
Montmartre parece triste
y las lilas han muerto.
La bohemia, la bohemía
erámos jóvenes, erámos locos.
La bohemia, la bohemía…
…ya no significa nada
Charles Aznavour – La Bohème
Fotografía de Antón Chroma |
¿Y si Dios fuera mujer?
pregunta Juan sin inmutarse,
vaya, vaya si Dios fuera mujer
es posible que agnósticos y ateos
no dijéramos no con la cabeza
y dijéramos sí con las entrañas.
Tal vez nos acercáramos a su divina desnudez
para besar sus pies no de bronce,
su pubis no de piedra,
sus pechos no de mármol,
sus labios no de yeso.
Si Dios fuera mujer la abrazaríamos
para arrancarla de su lontananza
y no habría que jurar
hasta que la muerte nos separe
ya que sería inmortal por antonomasia
y en vez de transmitirnos SIDA o pánico
nos contagiaría su inmortalidad.
Si Dios fuera mujer no se instalaría
lejana en el reino de los cielos,
sino que nos aguardaría en el zaguán del infierno,
con sus brazos no cerrados,
su rosa no de plástico
y su amor no de ángeles.
Ay Dios mío, Dios mío
si hasta siempre y desde siempre
fueras una mujer
qué lindo escándalo sería,
qué venturosa, espléndida, imposible,
prodigiosa blasfemia.
(Poema de Mario Benedetti)
Al hilo de lo que decíamos ayer ¿qué vendrá después de la soledad…? Pués eso, La Muerte. Eso sí, siempre y cuando algún pretencioso no intente trastocar los caminos del Destino. El corto que pongo a continuación, nominado para los Premios Goya 2010 (escrito y dirigido por Javier Recio Gracia) es de «coña», pero tiene su trasfondo.
Junto con «Alma» de Rodrigo Blaas, que también está nominado, es de lo mejorcito que se ha visto ultimamente.