Fotografía de ANDREAS H. BITESNICH |
Golpes Bajos ha sido el grupo español que más pasiones supo levantar entre los aficionados a la rama “culta” del pop español de la década de los ochenta. Mitificados entre otras bandas de “la movida” gallega, Golpes Bajos tuvo una existencia fugaz que, sin duda, sirvió para potenciar su posterior imagen de grupo idolatrado, ya que se disolvió en plena racha de éxito y reconocimiento popular.
Letras que perfilan situaciones extremas, kafkianas (No mires a los ojos de la gente / me dan miedo, siempre mienten / No salgas a la calle cuando hay gente / ¿y si no vuelves? ¿y si te pierdes? / Escóndete en el cuarto de los huéspedes / todo está a oscuras no pueden verte / Seguro que en la calle ahora habrá gente / Alguien te busca, alguien lo siente. / Quédate a mi lado no lo pienses más…), ritmos electrónicos (sintetizadores y graves), con ligeros toques funk, pero, sobre todo, una voz histriónica, esquizofrénica y excéntrica que provoca una relación odio/amor instantánea. En cierto modo, la «culpa» de que la propuesta se agotara de forma tan temprana, responde a ésta peculiaridad.