Erotic Photography
Todas las entradas etiquetadas como Erotic Photography
JOSEPH DEL DUCA a.k.a @josdelduca
Italian photographer. Mood, girls, nature and landscapes
ARCHIVO COMPARTIDO / SHARED FILE
Videoclip con un «mix» entre las fotografías de JOSDELDUCA y la música de TALKING HEADS «Listening Wind» de su álbum Remain in Light (1.980).
La evolución de la agrupación neoyorquina liderada por el guitarrista, cantante y compositor David Byrne y que formaban además, Tina Weymouth (bajo, coros), Chris Frantz (batería, coros) y Jerry Harrison (guitarra, teclados) fue realmente vertiginosa desde que comenzaron su asociación con Brian Eno en 1978.
Remain in Light representó un abismal salto en el sonido del grupo, nutriéndose especialmente del afro beat de Fela Kuti, que Eno introdujo en la banda.
“Listening Wind” envuelve con cierto aroma arabesco, la linea de bajo y la sencilla pero efectiva percusión, a la cual se suma Byrne repitiéndonos como un mantra:
“El viento en mi corazón / El viento en mi corazón /
El polvo en mi cabeza / El polvo en mi cabeza /
El viento en mi corazón / El viento en mi corazón…”
NICOLA RANALDI
Nicola Ranaldi es un fotógrafo romano que se dedica al estudio de imágenes de glamour, con especial atención al blanco y negro y a la fotografía erótica. Trabaja principalmente con retratos y fotografías publicitarias, dedicándose al erotismo y a la investigación en el campo del glamour en su tiempo libre, prefiriendo el uso del blanco y negro e imprimiendo sus fotografías a mano. Para la ocasión, una selección de fotografías con «temática común».
No quise.
No quise decirte nada.
Vi en tus ojos
dos arbolitos locos.
De brisa, de brisa y de oro.
Se meneaban.
No quise.
No quise decirte nada.
Federico García Lorca (Al oído de una muchacha)
ALEXANDER KLIUCHNYK (Kiev, Ucrania). Retratos, Fine Art y Fotografía erótica.
ARCHIVO COMPARTIDO / SHARED FILE
NOBUYOSHI ARAKI
(AMOR Y MUERTE)
Araki nació en 1940 en Shitamachi (literalmente “ciudad inferior” o “villabajo”), el área de Tokio considerada tradicionalmente como más pobre y humilde frente a los barrios altos de Yamanote… Y fue paseando por los barrios bajos como un joven de veintipocos años encontró material para Satchin, una serie de fotos con la que ganaría el premio Taiyo, su primer reconocimiento importante. Un retrato fiel del Japón de la posguerra, con sus contrastes entre las áreas en rápido desarrollo y las que aún mostraban los destrozos de las bombas incendiarias… La nueva Tokyo vista a través de los ojos de niños de familias humildes que juegan alegres en la calle. Satchin es una metáfora del renacimiento de Japón y de la esperanza en el futuro, además de un trabajo que es imposible ver sin sonreír en algún momento: viendo estas fotos me queda la sensación de que Araki ha conservado toda su vida la energía, entusiasmo y alegría de los críos que retrató.
Araki se mueve por las calles de Tokyo cámara en mano, retratando sin pensárselo cualquier cosa que le llame la atención. Su barrio favorito para ello ha sido siempre Kabukichō, en cierto modo el “barrio rojo” de Tokyo, lleno de love hotels, burdeles, clubes nocturnos, sex shops y gente interesante. El inolvidable libro Tokyo Lucky Hole, de 1980, muestra a un Araki juerguista, mujeriego y con una saludable capacidad para reírse de sí mismo y hacer lo que se le pase por la cabeza sin preocuparse de parecer respetable.
Los paseos de Araki prueban que es un maestro de la poesía urbana. En la serie de fotos Tokyo Nude, de 1989, Araki yuxtapone imágenes de mujeres desnudas con paisajes tokiotas de rascacielos, apartamentos, bosques de cables eléctricos… El fotógrafo recorre las calles de la ciudad con el mismo ánimo explorador con que repasa las curvas femeninas: la lujuria del urbanita, aunque siempre con un aire vagamente nostálgico.
No hace falta llevar mucho más allá la metáfora para visualizar a Araki penetrando en el interior de su ciudad en la serie de imágenes Subway. Desde que una parte importante de mi vida empezó a transcurrir en un sótano (larga historia) le he empezado a prestar especial atención a todo lo subterráneo: cuevas, parkings, catacumbas… Y los túneles del metro. Araki los atraviesa sosteniendo una cámara en el regazo, disimuladamente, y retrata a sus compañeros de vagón sin tan siquiera mirar por el objetivo. Guapas jóvenes dormitando, oficinistas leyendo manga, madres de familia pensativas, críos mirando por las ventanas…
Las fotos callejeras de Araki tienen el encanto natural de lo improvisado e imperfecto… Es lógico que sea uno de los últimos apóstoles de la fotografía analógica, y ha hablado a menudo de las virtudes que las sorpresas propias del revelado manual añaden a sus fotografías. Declaró en cierta ocasión que encontraba muy sexy el cuarto oscuro: quiero creer que se refería al de revelado…
“¡La fotografía es la vida! Empezó cuando conocía a Yoko”. (Nobuyoshi Araki)
La serie de fotografías que mejor ilustra la máxima de Araki «la fotografía es amor y muerte» es Sentimental Journey/Winter Journey, el melancólico e impactante retrato de dos décadas de matrimonio en una serie de imágenes que muchos consideran las mejores de su carrera.
En 1971 Araki se casó con una joven ensayista llamada Yoko a la que amaba con locura. Fiel a sí mismo y a su personaje, el fotógrafo se llevó la cámara a la luna de miel y la documentó cuidadosamente, así como gran parte de sus primeros años de casado. Observando las fotos nos volvemos testigos de sus paseos, baños, orgasmos, bailes, discusiones, alegrías… La mirada de Yoko es casi siempre muy intensa, soñadora, algo melancólica. Vemos centenares de retratos naturalistas de Yoko asomándose a la ventana, Yoko acariciando a su gato Chiro, Yoko nadando en un lago, Yoko dormida en un bote tumbada en posición fetal… Esta última imagen es una de las más conocidas de Araki, y resulta no sólo hermosa visualmente sino también extrañamente turbadora… Y es que jugando con la ventaja de saber que Yoko moriría pocos años más tarde, podemos ver en esa imagen un cierto presagio, un símbolo de su viaje al más allá en una barca funeraria. En un curioso momento del documental Arakimentari, de Travis Klose, Araki recuerda el momento en que tomó esa fotografía. Tras adoptar un aire melancólico unos segundos, sonríe y comenta el motivo por el que Yoko dormía… Básicamente que se habían pasado toda la noche follando y estaban ambos agotados.
En una entrevista con la artista Nan Goldin (amiga y colaboradora), Araki medita sobre el «olor a muerte» que el mismo arte de la fotografía desprende en su intento de convertir en estático lo esencialmente dinámico. Dice Araki: «cuando fotografío la infelicidad sólo capturo la infelicidad, pero cuando fotografío la alegría aparecen reflejadas la vida, la muerte y todo lo demás. La infelicidad parece grave y pesada; la alegría es ligera, pero contiene su propia pesadez, un sentido inminente de muerte».
Yoko murió en 1990, por culpa de un cáncer de ovario, y Araki se enfrentó a sus seis meses de agonía con la única arma de que disponía: su cámara. En una serie de fotos difícil de mirar sin que aparezca un nudo en la garganta, Araki retrata la progresiva decadencia de Yoko, las flores de su habitación de hospital, el último contacto de sus manos… Y finalmente los ojos cerrados de su mujer en el ataúd con tapa de cristal, cubierto de flores. Tras las imágenes de la tumba, vemos a la muy querida gata de ambos, Chiro, acurrucándose en el rincón de Yoko de la cama o saltando sobre la nieve recién caída…
Durante varios meses tras la muerte de su esposa, Araki fotografió casi exclusivamente cielos. Despejados, nublados, brillantes, azules, grises… Los imponentes y vacíos cielos de Tokyo.
“La atadura se convierte en un abrazo fuerte” (Nobuyoshi Araki)
El kinbaku (también llamado shibari) es el arte japonés de la atadura erótica, cuyos antecedentes técnicos pueden rastrearse hasta un arte marcial del siglo XVI y que actualmente es un ingrediente básico de la subcultura del sadomasoquismo. Nobuyoshi Araki tiene una enorme habilidad para la fotografía de kinbaku, y ese talento para fotografiar mujeres atadas ha sido frecuentemente malinterpretado o directamente incomprendido. Algunos grupos feministas le han boicoteado, llegando a tirarle piedras durante una exposición en Seúl…
Considerar misóginas estas imágenes (y, por extensión, al propio fotógrafo) es de una miopía notable, y demuestra no conocer en absoluto a Araki y su veneración casi mística por las mujeres y lo femenino. Dijo Araki en cierta ocasión: “hay muchos elementos esenciales en las mujeres: belleza, atracción, repulsión, obscenidad, pureza; el cielo y el mar, el capullo y la flor…”. Las elegantes ataduras de Araki no agreden a la mujer, sino que subrayan su belleza, la muestran bajo una luz diferente de tierna vulnerabilidad, enseñan otro aspecto de la sexualidad y de las relaciones entre sufrimiento, erotismo y éxtasis…
Araki se ha visto envuelto también en polémicas con la censura oficial japonesa, no tan preocupada por las imágenes de sadomasoquismo como por la aparentemente horrenda posibilidad de que se vean genitales en las fotos… En 1988 la policía retiró la revista Shanshin Jidai porque en ella aparecían fotos de Araki; en 1992 la exposición Photomania Diary fue suspendida y un escuadrón de policías revisó literalmente con lupa más de 1500 diapositivas para ver si mostraban genitales (escena que Araki recuerda riéndose a carcajadas).
Al evaluar sus fotos de bondage hay que tener en cuenta que Araki no es un nawashi (maestro de la cuerda): sus ataduras, incluso las más complejas como las suspensiones, son formalmente simples y repetitivas… Pero las imágenes tienen una elegancia sobrenatural y un enorme sentido de la estética, captando de forma única la generalmente intensa mirada de las modelos. El propio Araki ha comentado en la introducción de Todas las mujeres son hermosas (2006): “Existe una estética propia del bondage, como la del shibari de los maestros. Pero no necesito una perfección como esa en la fotografía. Ni siquiera tiene por qué ser un buen bondage. Cuando ato a una mujer, le digo “Estoy atando tu corazón, no tu cuerpo”. En realidad, podría desatarse de mi atadura… Pero no tiene por qué hacerlo”.
En la reciente serie de fotografías Hana Kinbaku, Araki presenta imágenes agrupadas en parejas: una flor en primer plano acompañada de una mujer inmovilizada según las técnicas del shibari. Entre cada pareja de imágenes se establece un diálogo temático y estético: los colores de las fotografías están especialmente cuidados y resultan siempre extrañamente complementarios…
«Todas las mujeres que me rodean, todas las que se ponen frente a mi cámara… Son diosas». (Nobuyoshi Araki)
Cuando Araki cumplió doce años su padre le regaló una cámara Baby Pearl, que estrenó en un viaje escolar fotografiando el templo de Ise y a una guapa compañera de clase que le gustaba. Como veis, las cosas no iban a cambiar demasiado en los siguientes sesenta años.
Araki empezó ese día a guardar en su casa miles de fotografías, en su mayor parte retratos. Nunca ha ocultado que prefiere retratar mujeres, con cuanta menos ropa mejor: “el origen del arte visual yace en la vagina”, dijo en una entrevista… Y como puede verse en algunos hilarantes momentos de Arakimentari, centenares de mujeres japonesas se mueren de ganas de ser fotografiadas por Araki, a quien nunca le han faltado modelos. Sean jóvenes impetuosas o respetables amas de casa de mediana edad, cuando llegan a su estudio no suele necesitar mucho esfuerzo para desnudarlas. Y es que casi todas quedan muy satisfechas al verse retratadas…
El porqué es sencillo de entender. Todas sus mujeres (estén vestidas o desnudas, atadas o desatadas, en compañía o solas) desprenden un aura especial, una cierta luz interior, un aire sagrado y a la vez natural y muy sexy. Cierta leyenda alimentada pícaramente por sí mismo sugiere que se acuesta con la mayor parte de sus modelos (quiero creer que no con todos, ya que en cierta ocasión retrató a una osa polar)…
Araki aparece de vez en cuando en las fotografías que saca (gracias al uso de temporizadores o disparadores), pero en ocasiones recurre a pequeños avatares de plástico, generalmente reptiles. Serpientes, dinosaurios y pequeños juguetes le sustituyen en escena, se acercan a las modelos y pasean sobre su piel. Curiosa forma de retratarse y captar su propia esencia…
“Tal vez esta exposición sea un réquiem por Chiro y por la fotografía analógica…” (Nobuyoshi Araki)
Decía Heinlein que nuestro comportamiento hacia los gatos acabará determinando nuestro status en el cielo. Si es así, Araki será sin duda un pez gordo en el más allá, ya que son miles las cariñosas fotografías que le ha dedicado a su gata Chiro, uno de los últimos recuerdos que le quedaban de su esposa Yoko (que fue quien trajo la gatita a casa). En uno de sus últimos trabajos, Sentimental Journey/Spring Journey, Araki ha seguido la enfermedad y muerte por edad avanzada de Chiro, de una manera similar a la del Winter Journey de Yoko. La fotografía de Chiro en su pequeño ataúd es inquietantemente similar a la de Yoko en el suyo…
Empezábamos este artículo con el septuagésimo cumpleaños de Araki, y no estará de más terminarlo mirando a su futuro. Tras su cáncer de próstata (que también documentó en una serie de fotos llamada sarcásticamente Tokyo Radiation) ha declarado que ya no es el sexo el motor de su trabajo, sino la vida misma en todas sus formas… De la cual aún le queda mucho por vivir. Araki comenta a menudo que aún le falta tiempo para llegar a la edad de Hokusai o Picasso, que murieron con más de noventa años, así que aún planea dar guerra durante algún tiempo. “Me parece que ahora empiezo a convertirme en un fotógrafo profesional”, dijo en su cumpleaños.
Fuente: Araki: amor y muerte
Publicado por Josep Lapidario
RAVEN YEH
Fotógrafo y diseñador gráfico ubicado en Taiwán. En su extenso portafolio encontraremos retratos, fotografia familiar, bodas, comerciales… y un apartado sobre fotografía erótica que es el que nos ocupa en esta entrada. La mayor parte con un estilo POV fuera de los cánones habituales en esta modalidad, que nos hace formar parte de la composición fotográfica.
Self-made Photographer from Paris, Alex Craig has always venerated the extreme sensuality of a Woman. The Big Project of Alex consist is to use his photographic experience in the fashion industry to sublimate the eroticism and the sexuality which gets free of his models. Because even the Porn can be treated like a form of Art, models and actresses deserve to get the best picture and movie quality.
SANTILLO
Will Santillo estudió fotografía en el M.I.T. bajo Minor White y ha trabajado en las áreas de la fotografía de moda, corporativa, arquitectónica e íntima. Sus fotos aparecen en el Mammoth Book of Erotic Photography, en New Erotic Photography de TASCHEN y en la monografía Flagrante Delicto. Vive en Toronto (Canadá).
Si el orgasmo es la pequeña muerte, ¿la masturbación es el pequeño suicido? El título significa “la pequeña muerte”, un eufemismo de orgasmo, pero las mujeres que se masturban con entusiasmo en este libro para el fotógrafo de Toronto Will Santillo forman un grupo tan vivaz como el que puedas toparte jamás. Santillo concibió el proyecto hace años para incluir una muestra concienzudamente representativa de mujeres: desde jóvenes hasta mayores y desde delgadas hasta gruesas, bellezas perfectas para aquellas no consideradas bellas hasta ser vistas a través de su lente. La única constante sería que cada una decidiría y dirigiría cómo se masturbaba hasta el clímax mientras él captaba el momento. A partir de proyectos previos con amateurs, Santillo había llegado a la conclusión de que la masturbación es un acto mucho más personal que la mayoría de los juegos sexuales, pues se lleva a cabo casi exclusivamente en privado. Así se dispuso a revelar la diversidad y la creatividad con que las mujeres se acercan a la autoestimulación, y a retratar la belleza de mujeres comunes a las puertas del orgasmo: una belleza mucho más rica que las representaciones de orientación masculina vistas en la pornografía. Santillo dice que busca desvelar la cara oculta de sus modelos, y ciertamente son las caras las que muestran mejor la intensidad de la respuesta en estas fotos artísticamente explícitas.
Dian Hanson entrevistó a 37 de las mujeres, y sus francas revelaciones sobre superar la inhibición entregándose al exhibicionismo y alcanzando el orgasmo ante un extraño con una cámara, dan marco a las suntuosas fotos de tono sepia. Para todos los que sienten curiosidad sobre hasta dónde llega la vecina de al lado —o la propia esposa de uno— en sus momentos privados, La Petite Mort es una bocanada de vida.
Post relacionado: LA PETITE MORT
DAVID HILTON El provocador
Bartosz Brudek alias NINO VERON, salta de la fotografía deportiva a la fotografía de modelos. Nikonista y Canonista, además de Hasselblad y Bronica. Nacido en Sosnowiec, Polonia (1976). Comenzó con la fotografía deportiva, pero durante muchos años se especializó en el arte del desnudo en blanco y negro y en retratos. Trabaja en la técnica tradicional – cámara analógica.
Le gusta fotografiar a las mujeres en interiores o exteriores con estilo. En 2013 fue el ganador del concurso polaco más prestigioso para fotógrafos de desnudos: Fotoerotica, organizado por la revista Playboy.
He aquí una breve selección del mucho contenido que puede encontrarse en su pagina web y photoblog.
DANIEL MINIMALIA, (Daniel Llorente) nace en Vitoria hace 28 años cuando grupos como U2, Police o Prince estaban en su pleno apogeo. Siendo muy niño él y su familia se trasladan a vivir a la ciudad de Ourense.
A los 8 años comienza a demostrar sus inquietudes musicales, mientras que la mayoría de los niños jugaban al fútbol en el recreo, él no se separaba de su walkman y escuchaba una y otra vez el disco “Rock and Ríos” que le marca profundamente por aquel entonces, a la edad de 13 años comienza a tocar la guitarra eléctrica de manera totalmente autodidacta después de recibir unas nociones básicas, influenciado por los clásicos de los 70 como Led Zepellin, Deep Purple, Thin Lizzy entre otros muchos, y los nacionales Héroes del Silencio o Los Suaves, aprende a tocar de oído las canciones y los solos que no dejaba de escuchar.
Con una guitarra de imitación de su hermano y “armado” con una simple radio, pasa horas y horas en la buhardilla de su casa intentando aprender los temas y discos que por aquel entonces ya le habían marcado. Recuerda con especial cariño como aprendió El estanque de héroes del silencio, la primera canción que toca y de la que más tarde haría una exitosa versión, o como se pasó meses para poder tocar entero el disco “Made in Japan” de Deep Purple.
Cuando apenas era un adolescente realiza sus primeras grabaciones caseras de versiones que él mismo graba y es a los 16 años cuando debuta por primera vez en una actuación en el instituto, Tras finalizar sus estudios de bachillerato, comienza a militar en grupos de rock, pasa por varias formaciones y funda con tres amigos de la Universidad “Zirkus”, su primer proyecto serio con el que editan una demo “Si abres los ojos”. Después de tres años tocando juntos por multitud de locales y cuando estaban comenzando a trabajar en su segundo trabajo, decide abandonar la banda para buscar nuevos horizontes, momento que aprovecha también para finalizar su carrera universitaria y sus estudios de postgrado.
“Al decir adiós”, una de mis piezas favoritas, cargado de nostalgia y emotividad, fue compuesto tras la pérdida de sus abuelos en sólo dos días. En definitiva, otra demostración que no siempre «lo de fuera» por el mero hecho de ser de fuera es mejor que lo de aquí..
SERGEY POPOFF (Orenburg, Rusia) Estilo mezcla fashion y erotismo, en la línea de Andrew Lucas, Andrey Razoomovsky e incluso en alguna de ellas se ve la inspiración de Ruslan Lobanov. En la presentación adjunta se pueden ver algunos trabajos que llaman mi atención.
“Cut my skin under the shoulder blade, where two of my tire a little wing! After all, when the air was – that I more than solid ground under my feet …”
«Corta mi piel por debajo de los hombros, donde brotaran mis dos pequeñas alas! Después cuando esté en el aire, que mas da la tierra que deje bajo mis pies.»
Disco seleccionado: HAWK, de Isobel Campbell & Mark Lanegan
«Come Undone»
«Es difícil estar loco, cuando hay tanta belleza en el mundo. A veces me siento como que estoy viendo todo a la vez y es demasiado, mi corazón se llena como un globo que trata de explotar… Y entonces trato de relajarme y dejar de aferrarme a ella, y luego fluye a través de mí como lluvia y no siento nada más que gratitud por cada momento de mi vida poco estúpido… »
Lester Burnham (Kevin Spacey) en ‘American Beauty’ (1999)
Fotografías de STEFAN GROSJEAN
Stefan Grosjean es un fotógrafo de arte erótico de Suiza, que toma y comercializa fotografías de desnudos con gran éxito. Curiosamente, el negocio de Stefan es tan exitoso porque en realidad no está funcionando tan tenazmente como uno esperaría que funcionara en un negocio real.
Stefan es también el propietario y productor de FairTradeNudes.com. No es uno de esos sitios web para adultos elegantes con una gran audiencia. Más bien, y lo que es más importante, es un espectáculo de una sola persona para financiar nuevas producciones. En pocas palabras, es la vida y la pasión de Stefan. En esta fase, los ingresos sólo cubren una parte de los gastos de producción. Stefan se esfuerza por dar siempre el mejor valor a sus seguidores, manteniendo todo en orden y con bajo mantenimiento, concentrándose completamente en el proceso de hacer fotos.
Música de CHRIS ISAAK «Wicked Game»
The world was on fire, no-one could save me but youIt’s strange what desire will make foolish people doI’d never dreamed that I’d need somebody like youAnd I’d never dreamed that I’d need somebody like you No I don’t wanna fall in love
|
El mundo estaba en llamas, nadie podía salvarme sino tú.
|
ARCHIVO COMPARTIDO / SHARED FILE
Soy una artista erótica no tradicional afincada en el Reino Unido. Mi enfoque principal es la escritura y la fotografía analógica, aunque recientemente he estrenado mi primera película erótica para XConfessions como escritora y directora invitada, sumergiéndome un poco más en el mundo de la cinematografía independiente para adultos y de la erótica en general. Estoy estableciendo límites y enseñando consentimiento, rompiendo la vergüenza y el estigma en torno a la desnudez y el sexo, buscando mi propia libertad de expresión; siempre honesta, siempre en constante evolución.
Sit there, hmm, count your fingers.
|
Siéntate ahí, mmm, cuenta tus dedos,
|
Muchas versiones se han hecho de esta canción original de Richard Rogers (1935): Frank Sinatra, Nina Simone, Ella Fitzgerald, Judy Garland, The Carpenters. Aunque he escogido la de Diana Krall, por ser más intimista, sin duda la más desgarradora es la de Janis Joplin:
Sabrina Dacos comenzó a mostrarse en la red mediante autorretratos en los que la calidad gráfica, el manejo de la luz, el arte con el que retrata su cuerpo, sus ojos azules -nunca su rostro completo- y sus poses lejos del puritanismo han ganado millones de adeptos. Apoyada únicamente con un trípode o junto con su novio y colega de imágenes, ha creado un complejo mundo del erotismo explícito en el que cada foto lleva el título de una canción.
Mi homenaje particular lo hago mediante la canción de Lou Reed «Coney Island Baby»
…Cuando estás completamente sólo en la noche y descubres que tu alma está en venta, y empiezas a pensar en todas las cosas que has hecho. Empiezas a odiar casi todo lo que te rodea.
Sin embargo, recuerdas a la princesa que estaba en lo alto de la colina. Y que te quería aún sabiendo que te equivocabas. Y ahora mismo, podría aparecer con todo su esplendor. Y con la gloria del amor. Si, la gloria del amor…
…Es la gloria del amor la que te sacará adelante.
Nota PD. Con el paso del tiempo se han ido deteriorando los trabajos de esta chica, resultando menos artísticos y más chabacanos. Lástima que atienda más a las demandas de los seguidores que a su propio yo
ALEXEY NIKISHIN